
Ya no soy lo que era
ni tampoco lo que parezco
hay veces que deslumbro
y otras que me desvanezco.
Hay días que me como el mundo
otros son un pasillo estrecho
en que todo aquello que toco
se queda, como poco, maltrecho.
Pero hoy de todo tengo ganas
comer de la noche y beber del sol
respirar vida, exhalar el hastio
sin pedir permiso ni perdón.
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